Fallece fundador de la Escuela de Derecho
El abogado y decano de los notarios públicos en Sonora, nació en Hermosillo, el 12 de diciembre de 1915 y le sobreviven su esposa María Elena Fernández Torres de Cabrera, así como sus hijos Ignacio, Marco Antonio, María Elena, Jaime, Francisco Javier y María Laura.
Dedicó su vida a la abogacía y se desempeñó como Notario Público número 11 desde marzo de 1949 hasta enero de 2009 pues tomó la decisión de retirarse por motivos de su edad. Fue titular del Supremo Tribunal de Justicia en el Estado y director de la Escuela de Derecho y Ciencias Sociales de la Unison.
Alumnos a quienes guió y formó en las aulas de la Máxima Casa de Estudios comentan que Cabrera Muñoz poseía un don de gentes que le permitía acercarse a los estudiantes por quienes mostraba preocupación para que llegaran al final de su preparación profesional.
"Era un maestro que sabía cómo acercarse a los alumnos y no era nada autoritario, al contrario, era simpático", expresó Carlos Moncada Ochoa quien fuera uno de ellos. Para Rafael Ramírez Leyva, Cabrera Muñoz, fue un hombre muy humano. Dispuesto siempre a ayudar a los estudiantes y siempre estuvieron las puertas de sus oficinas y despacho abiertas para los jóvenes que buscaban algún consejo y/o orientación sobre el derecho.
Ex alumno y hoy director del Instituto Superior de Seguridad Pública del Estado, recordó que Cabrera Muñoz siempre se caracterizó por ser muy cumplido y entregado con su cátedra.
Además, dijo, fue generoso y muy entusiasta en todo lo que emprendía y se puede decir que perteneció a una generación de brillantes hombres como Abraham Aguayo, Fausto Acosta Romo, Ramón Corral Delgado y Alfonso Castellano Idiaquiz, entre otros.
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